Estimulación de la osteogénesis
Las células óseas responden tanto a las fuerzas mecánicas como a las eléctricas. Cuando se aplica una carga en el hueso, el componente mineralizado y la matriz de colágeno se cargan eléctricamente.
La respuesta eléctrica de un hueso a la carga mecánica se define como efecto piezoeléctrico.
Este fenómeno es responsable de la adaptación del hueso a la carga mecánica y de la remodelación ósea que tiene lugar en la última fase de curación de la fractura para optimizar la competencia mecánica del hueso.
A partir de estas observaciones se llegó a la primera experiencia clínica en pseudoartrosis congénita de la tibia en pacientes pediátricos. Mediante la inserción de dos electrodos metálicos en los extremos de la pseudoartrosis se hizo circular una corriente eléctrica a través del foco de pseudoartrosis, lo que condujo a la curación de los pacientes.
Para que la estimulación de la osteogénesis no sea invasiva y desvincularla de la inserción quirúrgica de los electrodos se desarrollaron tres métodos diferentes de suministrar energía física con fines terapéuticos:
La estimulación biofísica representa una terapia segura y no invasiva que promueve la reparación del tejido óseo, acelera la curación de la fractura y reduce los tiempos de recuperación.